Medicamentos por vía ocular
Son productos preparados mediante métodos que aseguran su esterilidad, lo cual evita tanto la introducción de contaminantes como el crecimiento de microorganismos en el interior del envase. Por ello es conveniente respetar de forma muy estricta las normas de conservación y caducidad establecidas por el fabricante.
3 tipos de productos
- Las pomadas oftálmicas: son preparados semisólidos que se aplican sobre la conjuntiva.
- Los colirios: son soluciones o suspensiones acuosas u oleosas destinadas a la instilación ocular.
- Los baños oculares: son soluciones acuosas destinadas a ser instiladas o aplicadas en el ojo, habitualmente para el lavado ocular.
Los colirios
Su periodo de caducidad una vez abiertos es de un mes. Cada gota de colirio representa de 25 a 50 microl. Dependiendo del parpadeo, el volumen que puede retener el ojo es de unos 10 microl. Por lo tanto, la instilación de dosis de más de una gota en cada ojo es de dudosa eficacia. De hecho, cuando se prescribe más de una gota, es cuando se quiere asegurar una correcta administración (alteración de la destreza motora, ancianos, discapacitados, etc.).
Cuando se prescriben diferentes colirios a la vez, la administración de cada uno de ellos debe realizarse al menos con un intervalo de 5 minutos.
Los pasos a seguir
Para administrar medicamentos por vía oftálmica se deben de seguir los siguientes pasos:
- Primero lavarse las manos
- La persona debe estar sentada o estirada, con el cuello en leve hiperextensión. Así, además de acceder fácilmente al ojo, se reduce el drenaje del medicamento a través del conducto lacrimal.
- Si hay costras o secreciones en los anejos oculares, hay que limpiarlas suavemente con una gasa impregnada en suero fisiológico: la limpieza siempre desde ser desde el canto interno hacia el canto externo del ojo, para no introducir microorganismos en el conducto lacrimal. Hay que utilizar una gasa nueva para cada pasada.
- Cojer una gasa limpia y colocarla sobre el pómulo por si parte del medicamento se rebosa, lo absorberemos con la gasa
- Con el dedo índice presionar suavemente hacia abajo para que el globo ucular quede bien abierto y bien expuesto el saco conjuntival
- Se ha de mirar hacia arriba: así se reduce el parpadeo
Para instilar las gotas oftálmicas
Con la mano dominante descansando sobre la frente sostener el cuentagotas o el frasco con el medicamento 1-2 cm. por encima del saco conjuntival. Al tener la mano apoyada y el recipiente a esa distancia, se previenen tanto los traumatismos como las infecciones. Hay que instilar el medicamento en el centro del fondo del saco conjuntival.
Con una gasa apretar firmemente sobre el conducto lacrimal durante 1-2 minutos: así se previene el rebosamiento hacia las vías nasales y la faringe y la absorción a la circulación sistémica.
Para las pomadas oftálmicas
Desechar la primera porción de la pomada. Con la mano dominante aplicar una tira fina y uniforme de pomada en el saco conjuntival, yendo desde el canto interno al canto externo del ojo. Mantener una distancia de 1-2 cm. entre el tubo y el saco conjuntival, con el fin de evitar los traumatismos y las infecciones. Si en algún momento se toca el ojo con el aplicador del medicamento, hay que considerarlo contaminado y desecharlo.
Al llegar al canto externo, girar levemente el tubo en sentido contrario: así se facilita el desprendimiento de la pomada. Después se deben cerrar los párpados con suavidad, sin apretarlos, y así el medicamento se distribuirá uniformemente por el ojo.
Si se rebosa medicamento, límpiarlo con una gasa yendo siempre desde el canto interno al canto externo del ojo.
Después cerrar el recipiente que contiene el medicamento.
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